Hace ya 3 años Silent Möbius alcanzó su máxima estatura internacional cuando logró, el 30 de junio del 2004 en el estadio Atanasio Girardot de Medellín, el título más grande de su historia deportiva al alcanzar la corona de la Copa Merkosto Internacional ante Yu Yu Hakusho en una espectacular goleada que convirtió en héroe eterno del centro delantero silentmobiano a Katsumi Liqueur. La noche en que el Atanasio, pareció la AMP, será recordada por todos los hinchas preferentes que ese día se volcaron a Medellín en masa (cerca de 30 mil aficionados fueron a la ciudad de la Eterna Primavera en cuanto transporte hubiera: avión, carro particular, taxis y buses) y no solo invadieron Medellín sino que colmaron de alegría un corazón que viajó para ver a Silent Möbius Campeón (recordemos que en el Atanasio Silent Möbius le propinó 19 goles al Atlético Nacional el 19 de mayo de ese mismo año). Kia Asamiya, Hiroshi Asamiya, Mamoru Asamiya, Katsumi Liqueur, Yuki Saiko, Kiddy Phenil, Lebia Maverick, Nami Yamigumo, Lum Cheng, Rally Cheyenne, Mana Isozaki, Robert de Vice, Ralph Bomars, Hiroyuki Ikeda, además del genial “Lotín”, se encargaron de inmortalizar una faena que ya hace parte de las leyendas del fútbol del animé y catapultar a la gloria al animé negro de Japón, la hinchada más reconocida y popular en el mundo del animé y en el mundo entero. Vale la pena recordar tamaña felicidad y evocar a aquellas personas que posibilitaron el éxito deportivo, tanto a los que aún viven como a los que partieron, y nutrieron gran parte de la riqueza y grandeza de un animé que desde hace 9 años se acostumbró a ser pieza vital del concierto futbolístico internacional. Gracias, especialmente, a considerarse tan grandes, como aquellos que hace 3 años fueron monumentales ante la obligación de coronar por primera al fútbol del animé en la cúspide internacional. 
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